20/9/18

Valientes Mata Hari(s)


Una amiga empezó a llamarnos Mata Hari* cuando le contábamos nuestras relaciones o experiencias amorosas. En primer lugar hago referencia a ella y posteriormente, a todas las mujeres de mi vida. 
*Mata Hari fue una bailarina y espía holandesa, considerada la femme fatale por excelencia de la Belle Époque. 'Ser una Mata Hari', por tanto, significa ser una mujer fatal, un arquetipo de mujer expuesto a diversas interpretaciones (más info).  


¿En qué momento decidiste que éramos tus niñas "Matahari"? ¿Quizás dignas de admirar? 
Suelo no recordarlo, pero la amistad es admiración. 
Vosotras, mujeres maravillosasdecidí teneros a mi lado, admiraros, respetaros y daros mi cariño. 
Tú, una valiente Mata Hari a tu manera, nosotras, a la nuestra. 

Nos consideras unas femme fatale. Sonrío y pienso que hemos aprendido dignamente este papel. 
Tú también lo crees así y nos reafirmas con convicción. 
Y ahora entiendo que hacemos lo que podemos, lo que nos dejan, lo que nos permitimos, 
lo que necesitamos, aquello por lo que nos atrevemos, por lo que decidimos luchar. 

Cuando no crea en lo que haga me ayudaréis a entender el por qué sí y el por qué no.
Y una cena con vino sanará cualquier duda, y reiremos y nos creeremos unas valientes Mata Hari(s)porque será en ese instante cuando recordaré tu definición. 

Valientes mujeres, os veo luchar, sentir, insistir, equivocaros, rectificar.
Os contemplo preciosas, maquilladas y vestidas, como perfectas para una actuación. 
Os veo en mí, siento vuestra energía, y me encuentro empoderada de vosotras y espero que vosotras de mí.  
Os quiero siempre así, transparentes, y teneros en armonía, sin juzgarnos, comprendiéndonos.

Os permitiré algo, mirar hacia atrás, tantas veces como lo hice yo. 
Pero a cambio os pediré que busquéis una excusa, yo busqué la mía: escribir.
Os animaré a algo: a sentir, con ternura, con deseo, con pasión. Como podáis, sin complejos, libres. 
Y os aconsejaré algo: bailar, bailar, bailar… aunque sé que algunas de vosotras nunca dejaréis de hacerlo. 


A MIS AMIGAS: valientes Mataharis

3/5/18

VINITOS Y TANGOS


Me retaste a unos vinitos y yo me rendí, sin resistencia.
Imaginé tardes de domingo de no regresar a casa, me imaginé esquivando al lunes contigo, perdida en alguna conversación interesante y con una copa entre la mano.

Yo te reté primero y ahora crees que no soy más que un juego.
Me acerqué a ti con la osadía de quien no espera nada a cambio, desde la ingenuidad de escogerte sin conocerte.

Quizás no sepas que persigo sueños, bailando. 
Cualquier música me lleva a distintos movimientos, a marcar las notas a golpe de cadera, pecho, fluyendo acompañándome de brazos. Infinidad de pasos pendientes de coreografiar.

Entonces tú me hablaste del tango y me hizo pensar en el baile en pareja, en que también puede ser sensual e intenso. Tan sólo una actitud elegante, abrazar con seguridad, adornar con la pierna... Nada sencillo pero arrebatador, al fin y al cabo hace tiempo aprendí a empoderar mi cuerpo.

Quizás no sepas que persigo ideas, historias que escribir, pero mi inspiración llega intermitente y se hunde en mi día a día, siempre agotada.

Sin embargo a veces esas ideas me encuentran a mi, al leer, al escuchar algo.
O sencillamente al sentir, también hace tiempo aprendí a empoderar mis palabras, simplemente escribiéndolas.
Esta vez fueron un par de palabras, formaban una bonita combinación... vinitos y tangos.






24/7/17

TODO LO QUE QUIERAS SER


Sé lo que quieras ser justo ahora, hoy.
Puedes elegir vivir buscándote en otras personas, imaginando tu reflejo en futuros inciertos, en mediocres quizás...
O puedes elegir querer ser quien ya eres, aceptarte, amar tus virtudes y tus imperfecciones, y pelear por ser todo lo que quieras ser.

Ser lo que quieras ser es un estado de ánimo. Es la fuerza que tu mente proyecta en tu favor, hacia tu crecimiento y empoderamiento. Es la seguridad que se trabaja día a día para creer en uno mismo y para saber que puedes y que podrás, porque lo malo te hará más fuerte.

Tu mente aúna prejuicios, remordimiento, dolor... Debes saber que arrastrar con ello dependerá de lo que tú permitas. Únicamente tú decides que tu mente te haga libre o esclavo.
Debes saber que todas esas cicatrices han hecho ser quien eres, que es tu aprendizaje, tu historia de vida. Que todo eso te ha ayudado a ser más sabio y experto, pero no por ello deberá ser tu propio lastre.
Debes saber que todo se practica en esta vida y únicamente tú decides el drama por el que apostar.

Ser lo que quieras ser no es algo sencillo de lograr, no llega por casualidad, es un largo recorrido de autoconocimiento. Es un profundo análisis DAFO de uno mismo, puedes enumerar tus debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades, y ese serás tú frente al mundo.

Ser lo que quieras ser es sentirse realizado, es conocer tus habilidades y esforzarse en desarrollarlas. Tu talento es tuyo, nadie te lo podrá arrebatar.  
Creo absolutamente que todos nacemos poseyendo un talento y que la vida, la educación, las circunstancias pueden no encaminarse jamás a potenciarlo. En tu mano estará luchar por tu talento y hacer que brille.
También creo que la educación escolar no ayuda a desarrollar nuestros talentos. Tratan que seamos buenos en todo, en ciencias, en humanidades... y acabar, quizás, siendo aceptables en todo pero no destacando en nada. ¿No sería más maravilloso que todos dirigiéramos nuestros pasos a lo que realmente se nos da bien? Seríamos más felices y sin duda, nos sentiríamos más capaces para lograr nuestros objetivos.

Leí sobre la teoría del ilímite y me pareció iluminadora. Iago Pérez desarrolló esta teoría que sostiene que las personas necesitamos formar nuestra propia identidad, y existen dos procesos que cumplir: reconocer las propias limitaciones y ser conscientes de que tenemos ilímites. Los ilímites son las mejores capacidades y competencias de una persona, que le hace destacar en un campo específico. Y afirma que “la capacidad de progresar en la vida es ilimitada”.

Empieza a practicar en positivo, no pierdas tiempo. 

Enseña tu mejor versión y grita al más capullo “aquí estoy yo”. 

Lucha por tus talentos, empodérate. Lucha sabiendo que eres imperfecto, pero que aceptarlo te hará de algún modo “más perfecto”.

Y sé todo lo que quieras ser.






1/8/16

Adórate mucho


Esta vez escribo este post en el tren. Renfe decidió vendernos los billetes de un regional exprés pero no cayó en la cuenta que había menos asientos que pasajeros...un tren destino Valencia que ya venía bastante lleno de la Estación de Francia. Afortunadamente, una hora más tarde aquí estamos, deseando llegar a nuestro destino y "denunciando" de alguna manera esta mala gestión.

El traqueteo, el paisaje y algunas palabras me han animado a escribir algo, una pequeña reflexión sobre adorar y "adorarse".
Adorar es como un me gusta pero más enfatizado, algo como un "me encanta". Voy a practicar el adorar más a menudo... reconozco que es una palabra que no utilizo mucho. 
Por ejemplo, yo adoro la playa y el verano, adoro viajar, adoro a mi hermana aunque en ocasiones llegue a odiarla. También adoro mi piso y lo bien que me hace sentir lo que he construido en él. Por supuesto adoro este blog.

Después de listar eso y aquello que adoramos, podríamos llegar a pensar en un "me adoro a mí mismo"? Seguramente no lleguemos a esta conclusión, somos personas humildes, verdad? 
Pues acabo de darme cuenta que adorarse no es necesariamente igual a tener mucho ego. Adorarse también significa quererse mucho, ¿alguien os va a querer más que vosotros mismos?

Alguien cercano a mí me ha dicho que me adoro mucho. Quizás esta persona me vea algo presuntuosa o creída. 
De antemano a saber más, me he tomado la libertad de decir que ojalá me adorara más, que ojalá las cosas fueran más bonitas de lo que parecen.

Que ojalá me adorara más cada mañana y dijera siempre un fuerte "tú puedes" en vez de pensar "otro simple día más". 

Que ojalá supiera adorarme más frente al espejo y no pensara que ya son 30 años y que mi cuerpo no es el que desearía.

Que sería genial esto de adorarme cuando me siento triste porque quizás lloraría menos, dormiría más y tendría más fe y esperanza.

Que también sería maravilloso adorarme mucho y siempre frente a cualquier chico, porque así podría dejar de lado la desconfianza y el miedo al fracaso. 

Y que ojalá adorarme fuera sinónimo de éxito, porque lo haría más, no en contadas ocasiones.

Gracias por tu sincero "te adoras mucho". A ti te adoro también aunque aún no sepas verlo.





                                                                         ♪♫ Jon and Roy - What I Need